El envarado es una práctica agrícola muy importante para la agricultura y el medio ambiente. Es una técnica que reduce la erosión del suelo, mejora su funcionalidad y permite un mejor uso de los recursos, lo que permite una mejor producción, rentabilidad y sostenibilidad de la agricultura. En la agricultura, el envarado consiste en la cubierta de los suelos con materiales de origen orgánico o mineral para evitar la erosión del suelo y así mejorar su productividad. Esto se logra evitando la erosión provocada por el agua, el viento, el sol y la cosecha. El envarado es un procedimiento de recubrimiento de los suelos con materiales vegetales, como ramas, hojas, tallos, ramitas, mantillo, césped, lienzo, lona, aserrín, cinta de alambre, tela asfáltica, vivac, materiales de origen mineral como grava, gravilla, gravilla triturada, gravillas limpias y carbonatos, entre otros.
Estos materiales impiden el escurrimiento de la lluvia o el simple desprendimiento del suelo, mejorando la resistencia al impacto y la estabilidad del agregado. Además, la cobertura resultante mejora la capacidad de retención de agua del suelo, lo que posibilita una mejor duración y productividad de los cultivos. Los materiales de envarado también ayudan a formar la estructura de la mezcla del suelo, promover la recarga de nutrientes en el suelo, reducir la evaporación y controlar la temperatura del suelo. Además, el recubrimiento en el suelo reduce la compactación por el impacto de la maquinaria sobre el suelo. Esto retrasa el crecimiento de la maleza y facilita el acceso al suelo para los cultivos.
Como ayuda un tutoreo de hortalizas
El envarado también permite el crecimiento de plantas de cubierta, ayudando a mantener la fertilidad del suelo, así como a almacenar carbono, mejorar el contenido de nutrientes y la estructura del suelo, reducir los riesgos de incendios y la contribución a la biodiversidad. Además, la cobertura del suelo es también una importante medida de control de plagas, que permite el control de plagas no a través de plaguicidas químicos. Esto contribuye a una agricultura biológica sostenible, respetuosa con el medio ambiente y con las personas. El envarado es un proceso de agricultura que se ha utilizado durante siglos para mejorar la salud de las plantas, su sabor y su apariencia. Se trata de una técnica muy antigua y muy útil para los agricultores, ya que permite controlar mejor las condiciones del suelo y la producción de los cultivos.
El envarado se refiere literalmente a la acción de crear terrazas en una ladera, que son pequeños contenedores circundados por una pared de piedra, para el cultivo de suscriptores/raíces, frutas y hortalizas. Estas terrazas se construyen por medio de muros de tierra que se van construyendo de forma escalonada sucesivamente, con las bases de los terraplenes más bajas que las cimas. Está técnica aporta beneficios al suelo ya que impide la erosión del mismo, captan el agua y la mantienen en el suelo durante más tiempo con lo cual el riego en forma de lluvia y abonos se aprovechan de forma más óptima. También ayuda a evitar la erosión vertical, es decir la desecación del suelo. Además de los beneficios al suelo, el envarado también mejora la producción de los cultivos porque se protege mejor a las plantas.
Proceso de envarado
En este proceso se crean muros internos y externos para limitar la cantidad de viento, los aportes de agua, el crecimiento de la hierba y la erosión. Estos muros tienen la función de reguladores del riego, ya que los drenajes permiten que el agua fluye de la terraza de arriba hacia la siguiente, lo cual disminuye el riesgo de estancamiento del agua en el fondo. Además, el envarado también permite que se cultiven más variedades de plantas en áreas que normalmente no serían aptas para el cultivo, como superficies inclinadas. Esto es muy útil para proteger la tierra de la degradación, controlar la erosión y mejorar los niveles de producción. Esta técnica también ha demostrado ser una excelente herramienta para la diversificación y selección de variedades de plantas, lo cual es especialmente útil en climas cálidos.
El envarado también mejora la calidad y el sabor de los cultivos. Esta técnica limita la exposición directa a la luz solar, ayuda a conservar el suelo húmedo e incluso permite que el suelo se regenere entre cosechas. Esto mejora el equilibrio de los nutrientes en el suelo, lo cual se traduce en una mejor calidad de frutas y hortalizas. En resumen, el envarado es una técnica antigua que ha demostrado ser muy útil para los agricultores, ya que ofrece grandes beneficios al suelo, a la producción y la calidad en la cosecha. Esta técnica puede ayudar a los agricultores a mejorar su producción en áreas inclinadas, limitar la erosión del suelo, conservar el agua y mejorar la calidad y sabor de sus cultivos.