Transfórmate en un experto con estos simples pasos en el envarado de pepinos.
El pepino es una de las plantas más amigables para aquellos que deseamos empezar a cosechar vegetales siempre y cuando se sigan un conjunto de pasos desde la preparación de la tierra hasta la cosecha, siendo el más importante la práctica del envarado de pepinos. Este método se conoce como “tutoreo o entutorado”, ya que se emplean tutores o cañas para mantener recta una planta, nos va a permitir mejorar y facilitar la cosecha, y que a su vez el pepino no se nos estropee con el contacto con el suelo.
Cuándo realizar el envarado de pepinos
El envarado de pepinos es una práctica recomendada para este vegetal ya que su planta es una enredadera, lo primero que debemos hacer es buscar en donde se puede enredar la misma. Es una práctica muy común similar a la rafia para tomates. Por esto lo principal son las alambreras, mallas o hilos fuertes, así como varillas y palos para que le den camino. De esta forma no robarán espacio en nuestro huerto y hace más fácil su cuidado, en especial para huertos pequeños, así como en sitios de siembra donde queremos aprovechar más el espacio.
Si solo sembramos los pepinos y los dejamos fluir libremente terminaran regados por el suelo, por eso al momento de brotarse debemos colocar algún soporte o envarado a los pepinos para que no toquen la tierra o si no se pudrirán. También nos ayudará muchísimo más a la formación de la planta con lo cual nos ayuda a prevenir muchas enfermedades por hongos.
¿Por dónde empiezo a hacer el envarado de pepinos?
Al momento de salir los pepinos que sembraste en tu huerto, debes poner algún soporte para que no toque la tierra, recordemos que si la toca se pudrirá. La planta requiere de 6 horas mínimo de sol, pero si recibe un poco más muchísimo mejor. Necesita mucha agua, es importante que el suelo permanezca húmedo casi todo el día, pero siempre recordando que no se agrupe el agua en sus raíces. A esta planta le encanta el sol, y no le gusta el frío, si hace mucho calor nos crecerá más rápido.
Podemos empezar a aplicar esta técnica únicamente cuando nuestra planta haya alcanzado los 30 centímetros, a partir de allí será el momento ideal de preparar nuestro tutor para empezar a realizar el envarado de pepinos. Los soportes que podemos usar son cualquier tipo de palo o caña, también podemos utilizar varas corrugadas para una mayor resistencia.
Iniciamos colocando cada tutor metro o metro y medio de distancia de separación en el huerto,
ubicándolos cerca de la base donde tenemos los pepinos plantados a aproximadamente unos 10 centímetros. Entallamos el tutoreo a una profundidad tal para que soporte todo el peso, recomendamos usar barras de acero corrugadas debido a que son mucho más resistentes que cualquier palo o caña, su desgaste es menor, llegando incluso a durar muchísimos años, además que el peso que soportan las varillas corrugadas es muchísimo mayor.
Una vez colocadas las varillas vamos a utilizar este arte antiguo que es muy interesante y similar al de la rafia, porque los pepinos se van a ir agarrando conformando una estructura tipo de malla sencilla, permitiendo que la planta vaya trepando sola, de forma que se estructure un enramado entre cada varilla y aproximadamente al mismo tiempo formando un zig zag de manera que la malla permita mantener el tutoreo de pepinos erguido.
la malla estructural
Es muy importante que en el momento que realicemos la malla para estructurar el tutoreo de pepinos, que vayamos haciendo poco a poco el tejido en todas las varillas a la vez, no hace falta que nos quede muy tenso el amarre, ya que en este caso la estructura tipo malla beige, permite sujetar la planta de pepinos al envarado, lo ideal es sujetar la malla a la varilla corrugada de este modo no tenemos que estar abordando ningún tipo de cuerda.
Se baja el amarrado por el envarado poco a poco de modo tal que esté la malla amarrada a la par aproximadamente al mismo nivel. Cuando lleguemos al momento de poner la malla abajo, debemos tener mucho cuidado ya que podemos partir la planta.
Recomendamos colocar las varillas de dos metros y medio de distancia entre sí, para disponer de la opción de colocar otra planta más encima, de tal manera que si no crece mucho pueda seguir trepando por la cuerda.
Nosotros podemos ir ayudando a la planta de pepino para que vaya trepando por la malla acomodándola de forma que la planta va a ir creciendo hacia arriba, enganchándose ella sola a la malla ¡Así ya tenemos nuestro envarado de pepinos!
Cosechar los frutos de nuestro envarado de pepinos
El pepino es un vegetal que debemos cosecharlo inmaduro, es decir cuando no esté formado en su totalidad. Esto se debe a que su sabor es muchísimo mejor en este punto, además con esto incitamos a que la planta siga produciendo más fruto sin pasmar nuestro huerto.
Para cosechar el pepino en su mejor momento podremos empezar a recolectarlo a partir de los 40 días aproximadamente, su maduración puede variar de 40 a 60 días después de haberlos plantados.
Debemos cosechar nuestros pepinos justo antes de que las semillas se formen completamente, esto nos permitirá reutilizarlas antes que se pongan duras, además el pepino totalmente maduro es muchísimo más amargo cuando termina su maduración, por lo que debemos fijarnos que su grosor no pase de 3 a los 6 centímetros, este será su punto óptimo para cosecharlo.
También pueden determinar que su pepino está listo para cosechar por medio de su color, mientras más cercano al amarillo se encuentre más amargo será nuestro pepino. Para cosecharlo debemos sujetar la raíz suavemente con una mano, apoyándonos en nuestro envarado para no lastimar ni el vegetal ni la planta con una mano y con la otra le damos vueltas delicadamente al pepino hasta que se salga, también podemos emplear un cuchillo o tijera de jardinería para cortar el pepino de la planta.
Así que los invitamos a animarse a intentar un huerto con envarado de pepinos o experimentar con otras técnicas como la rafia para el campo según los huertos que busquen construir.